San Telmo es una historieta...¿Venis?
San Telmo es uno de los barrios más antiguos y mejor conservados de la siempre cambiante Buenos Aires. Y siempre tiene para mostrar algo...
A sus caserones coloniales y calles de empedrado se suman sus mercados y algunos reductos históricos que nos remiten en forma inmediata al pasado de esta bella parte de la ciudad que para muchos sirve, cualquier día a cualquier hora, para volver a otros tiempos,
Pero una de las cosas que diferencia a San Telmo de otros barrios de la Ciudad de Buenos Aires es que este barrio siempre tiene algo para mostrar, en este caso, un número increíble de personajes que salieron de las historietas y se convirtieron en muñecos gigantes que ahora decoran esquinas memorables del viejo barrio.
Bautizado como Paseo de la Historieta, este atractivo turístico que logra cautivar a extraños y vecinos de la ciudad es uno de los más recientes paseos del barrio.
La idea comenzó con la escultura de la pequeña Malfalda y, luego del éxito obtenido siguió con otros personajes memorables que al igual que la creación de Quino querían tomar "vida".
La idea desde un principio rendirle homenaje a los maestros del humor y a sus entrañables creaciones. Esto logró que sin pensarlo, cada vecino porteño conozca como se divertían otras generaciones en cada época que pasó.
A Mafalda, que nació en 1964 de la mano de Quino, se la puede encontrar sentada en un banco de plaza en Defensa y Chile, donde grandes y chicos posan para sacarse fotos y comienzan el recorrido en busca de los otros personajes.
"Má...¿quién ese este tipo?, preguntale al señor" es una de las frases que suele escucharse a los más pequeños cuando no saben de quién se trata. Y así, el pasado vuelve otra vez al presente y se genera una interacción olvidada entre las distintas generaciones que hoy comparten la vida en la ciudad de Buenos Aires.
En el mes de Junio del 2012 fue aprobado el proyecto en la Legislatura porteña para agregar nueve esculturas más al flamante paseo de las viñetas: Isidoro Cañones, Largirucho, Matías, el Loco Chávez, Clemente, Chicas Divito, don Fulgencio, Patoruzú y Gaturro.
¿Dónde más podía estar Isidoro Cañones, el gran playboy argentino? En la puerta de los boliches, por supuesto. En la esquina de Chile y Balcarce.
Isidoro nació en 1953 gracias al gran Dante Quinterno e hizo reír a distintas generaciones con sus locuras diarias y nocturnas. A sus amigos fieles y a su bella Cachorra le sumó una cantidad de amigas inalcanzables para cualquier otro vecino de Buenos Aires, a excepción del genial Isidoro.
En Balcarce y México nos encontramos con Larguirucho. Creado por Manuel García Ferré en 1967, detrás de esta especie "rara" de sujeto se tejen historias y personajes increíbles que cautivaron a grandes y chicos, y que hoy son parte del presente.
Y así hay más personajes que tomaron vida desde una historieta y hoy se convirtieron en parte de la fauna porteña de todos los días.
Hoy, podemos decir que la idea fue un éxito y que estas esculturas en tamaño real, hechas con resina y fibra de vidrio en el taller del artista Pablo Irrgang, nos permiten unir el pasado y presente de las historietas y comics argentinos.
Algo imposible en otros tiempos....