Visitamos el Museo de Arte en Tigre
Una construcción emblemática de la zona y una colección de arte perfectamente preservada a la vera del río.
Allí donde termina el Paseo Victorica, uno de los recorridos más pintorescos que se pueden realizar por Tigre a lo largo del río Luján, se encuentran la Municipalidad y el Museo de Arte de Tigre. Ese rincón contiene gran parte del presente y del pasado (y el patrimonio) de Tigre y de la Argentina.
La cúpula del antiguo Tigre Club (hoy sede del Museo de Arte) se puede ver desde lejos, aunque al llegar allí no deja de sorprender su entrada con jardín, la enorme terraza con balaustres y las esculturas modernas al aire libre. El edificio, inaugurado en 1912, es uno de los clásicos ejemplos de la ola de construcciones que inundó la Argentina hacia el Centenario y que imitaban la arquitectura europea.
El Tigre Club (junto con el Tigre Hotel que se encontraba a su lado y ya no existe) fue diseñado por una sociedad que deseaba contar con un centro social que fomentara el esparcimiento. En su planta baja se ubicó un casino, mientras que la planta alta, con su enorme sala oval, se usó como salón de baile, los dos espacios ornamentados con escaleras de mármol de Carrara, los pisos de Eslavonia, los espejos venecianos, las pasarelas de bronce y arañas con sus caireles.
La época de gloria del Tigre Club, sin embargo, no duró mucho. La crisis económica de 1930 y la ley que en 1933 prohibió los juegos de azar llevaron a su decadencia y abandono. Recién cuarenta años después una ordenanza municipal expropió el edificio hasta que finalmente, en 2006, se inauguró el Museo de Arte de Tigre, que depende del municipio. Así, actualmente el lugar guarda una colección estable de obras de grandes maestros -Quirós, Carlos Pellegrini, Sívori, Quinquela Martín, Berni, Soldi, Spilimbergo- del arte figuritivo argentino, que abarca desde fines del siglo XIX hasta mediados del XX.
El patrimonio artístico está organizado en distintas secciones (el arte que representa el Delta, una sala histórica con los precursores del arte argentino, el grupo Nexus, el grupo de La Boca), que permiten apreciar la continuidad y, a la vez, la evolución de un arte variado y fascinante. Así la visita al Museo de Arte de Tigre nos brinda la posibilidad de disfrutar del pasado de Argentina y de varios de sus principales artistas, sobre un Delta que nos permite reposar al sol.