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Transformarnos o vivir de recuerdos

El verdadero cuco de Argentina es sí misma

Escuché en la transmisión de un partido que en este mundial cualquier encuentro que pinta para “partidito” termina convirtiéndose en “partidazo”. Es un sentimiento general que empezó a correr como reguero de pólvora desde el no tan lejano 12 de junio. Esa es la verdadera sorpresa del mundial, y vaya que fue grata. Nos fuimos acostumbrando a: 1) los cucos, 2) a los países cabeza de serie, 3) a los equipos de relleno y 4) a los seleccionados como únicos protagonistas.

Cuántos cambios en 4 años, cuántos. Y algunos no son muy positivos.

1) Por empezar el cuco no existe, en eso Maradona tenía razón. Pero tampoco vale subestimar al adversario. Con saber a qué te enfrentás tenés la mitad del trabajo hecho; claro, la otra mitad te va a hacer sudar, y cómo.

2) Algunas cabezas de serie están siendo decapitadas ¿por qué no meter todas las bolillas juntas y que sea lo que dios quiera en el próximo sorteo? Sí, ya sé, vamos a tener que tomar un par de pastillas de carbón antes de que la mano ingrese en el bolillero.

3) Por otro lado, habrá que empezar la dieta (aprovechemos que es lunes), porque los “rellenos” están cayendo pesaditos últimamente. Y más de uno se está llevando puesto a los invencibles con chapa de campeón.

[Abro un paréntesis y me voy de tema, sepan disculpar] No me quedó un segundo de partido sin ver del domingo. Mientras tecleaba como loca en la computadora para adelantar trabajo, fueron pasando el 1 a 0 de Bélgica sobre Rusia, el 4 a 2 de Argelia sobre Corea del Sur y el 2 a 2 de EE.UU. y Portugal. Hubo goles de todos los colores. De hecho la estadística de Brasil 2014 marca que hay 3 goles mínimo por partido y que ya se habría formado un nuevo arcoíris con nuevas tonalidades.

Que Cristiano Ronaldo cayó en el off side al menos 7 veces lo pudimos apreciar desde el sillón de casa, cómodos, en vivo y en directo. Pero que además, en vez de volver al juego de inmediato, se ponga a mirar por las pantallas HD del estadio la jugada en discusión, es preocupante. Y no le alcanza con eso, ni con ir perdiendo hasta el último segundo y estar a punto de quedar afuera del torneo, ni con patear desviado… a unos 25 metros del arco, ni con simular faltas (que por suerte Pitana no compró) ni con decirle al lineman por señas “más o menos” ante la banderita alzada de una posición adelantada que le cobró, ni que vuelva a silbar todo el estadio cada vez que toca una pelota. No, no le alcanza. Él siempre va por más. Está bien, se tiene confianza, hay que felicitarlo. Eso sí, me gustaría saber qué cazo le dice al técnico Paulo Bento cuando lo agarra en el vestuario, ¿le hará “montoncito” con la mano, le hará “hombrito” de qué me importa?

Pobre Ronaldo, siempre me voy de tema con él. Lo que quería destacar era dos puntos sobre Estados Unidos. Por un lado, ya no es el país del pochoclo y el fútbol americano. Bueno, sí lo es; pero también es un país que avanzó mucho en comparación con las últimas apariciones en mundiales. Saben qué hacer con la pelota cuando la tienen. Lo que no saben aún es cómo. La defensa merece un párrafo aparte, empezó el partido dormida y le embocaron un gol en menos de 5 minutos. La delantera tenía buenas ideas, pero muchas veces se encontraron corriendo mientras se olvidaban la pelota 10 metros más atrás; o metían un contra ataque que parecía letal y cuando llegaba la hora de dar el pase al que iba a definir se equivocaban de punta y se la entregaban al único jugador que estaba marcado. El medio campo estuvo concentrado 1 tiempo y 3/4. Una lástima, los últimos 10 minutos fueron puro nervio y distracción, perdieron pelotas fáciles de controlar, entregaron pases al rival… y así llegó el empate sobre la hora. [Cierro el paréntesis, un poco largo, por cierto.]

4) Soy masoquista ¿les dije? Sí, soy como Ronnie. Me fui a dormir con la imagen de nuestra selección saltando al son de “Brasil, decime que se siente…” y el Kun aporreando un rallador. El camino es lento, pero siempre se llega a algún lugar. Nosotros llegamos hasta acá, hasta la vergüenza ajena, hasta ser hinchas de nuestra propia hinchada. Canchereando al pentacampeón. Vamos, manga de pavotes, ¡a laburar! ¿O se creen que todo se termina cuando pasamos a 8vos? Chau Teteras, Totoras o como cuernos se llamen, chau selfies, chau auto-bombo, chau mensajitos en el twitter, chau botinetas de colores, chau peinados de peluquería. Elijan, es eso o… chau mundial.

A los que no lo vieron, les dejo el link del que no volvemos nunca más: http://www.youtube.com/watch?v=AR4n4e0Om2Q