La vida es nada para ustedes, dijo la viuda del turista asesinado en Puerto Madero.
¿Se hará justicia? En un país donde la culpa la tiene siempre el que labura creemos que no.
"La vida es nada para ustedes”, la carta de la viuda del turista inglés asesinado frente al Hotel Faena
Susan Helen Gibbard (55) se la escribió a los homicidas y la leyó en la audiencia: “Creí que íbamos a envejecer juntos”, se lamentó sobre su esposo.
Y tiene razón, toda la razón del mundo.
Se equivocó en algo el marido, en haber venido a este país "tan hijo de puta" que desde hace décadas dejó de ser "un orgullo para el mundo".
El empresario Matthew Gibbard tenía 50 años y había viajado a Buenos Aires junto a su esposa Susan Helen Gibbard, su hijastro Stefan Joshua Zone (30) y su nuera.
Lo asesinaron en la puerta del Hotel Faena, en Puerto Madero, apenas llegó desde el aeropuerto internacional de Ezeiza.
Su familia dio su testimonio vía Zoom en el juicio contra cuatro imputados y la viuda leyó una carta conmovedora.
Los Gibbard habían arribado al país para pasar las vacaciones de Navidad en un vuelo de British Airways que aterrizó a las 9.20.
Según descubrieron los investigadores, los estaban vigilando mientras tomaban una combi que los trasladó a Puerto Madero. Apenas llegaron a hotel, dos motochorros asaltaron al grupo. Gibbard y su hijastro se resistieron, por lo que les dispararon.
Todos declararon ante los jueces Silvia Guzzardi, Pablo Vega y Juan Giudice Bravo, del Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional Nº 17, y dieron detalles de lo que ocurrió aquel 14 de diciembre de 2019.
“Creí que íbamos a envejecer juntos”: la desgarradora carta de la viuda del turista inglés asesinado en Puerto Madero
Hacia el final de su exposición, la testigo pidió leer una carta en la que detalló cómo su familia atravesó el tiempo transcurrido desde el homicidio.
“El impacto de la muerte de mi esposo tiene ramificaciones totalmente dramáticas para nuestra vida, para nuestros hijos, familia y amigos -comenzó la mujer-. Creí que íbamos a envejecer juntos: sé que la vida es nada para ustedes y que mi marido fue simplemente un objeto pero su vida fue muy importante para muchos de nosotros”.
“Matthew no murió por una enfermedad sino por una acción violenta provocada para conseguir dinero y un reloj”, continuó, y agregó: “Cuando hablamos de él en pasado es tan doloroso como pensar en que no lo voy a ver más”.
“Todos tienen la opción de ser buenos o malos en la vida y todos ustedes decidieron ir por la maldad ese día”, dijo en relación a los imputados por el homicidio y afirmó que “cada persona colaboró” en la muerte de Gibbard. “Nos vieron en el aeropuerto, eligieron seguirnos y cometer este terrible delito. Espero que todos vean que las elecciones en la vida tienen consecuencias: nunca entenderán la pesadilla que hemos vivido”, concluyó.
¿Se hará justicia?
En un país donde la culpa la tiene siempre el que labura creemos que no.
Perdón señora, perdón señor, somos un país de mierda.